En un hito histórico, se han firmado acuerdos de conservación en el Parque Nacional Cordillera Azul, en la región de Loreto. Estos acuerdos involucran a las asociaciones agroforestales y a la comunidad shipibo-konibo, con el objetivo de proteger este importante ecosistema.
En primer lugar, se ha suscrito un acuerdo con la comunidad nativa Manco Cápac y su Asociación de Artesanas BIRIYAKA, perteneciente a la etnia shipibo-konibo y ubicada en Contamana, Ucayali. Esta asociación desempeñará un papel fundamental en la conservación de la biodiversidad local y en la promoción de prácticas sostenibles en la zona.
Además, se ha logrado un acuerdo con la Asociación Agrícola y Forestal de Nuevo Dorado de Insaya, dedicada a la producción sostenible de bolaina, y con la Asociación Agroforestal y Aprovechamiento Sostenible del Aguaje del centro poblado San Lorenzo. Estos acuerdos permitirán la diversificación de los terrenos agrícolas y fomentarán la producción y comercialización de productos de alta calidad, como el aguaje, el cacao y la bolaina.
Estas alianzas estratégicas entre las comunidades locales y las asociaciones agroforestales son de vital importancia para la preservación del Parque Nacional Cordillera Azul. Además de salvaguardar la riqueza natural de la zona, estos acuerdos buscan fortalecer la gobernanza del parque y mejorar la calidad de vida de las comunidades involucradas.
La cogestión entre el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) y el Centro para la Investigación en Medio Ambiente (CIMA) es fundamental en este proceso. Juntos, están trabajando para garantizar la conservación a largo plazo de este valioso patrimonio natural, mientras se promueve el desarrollo sostenible de las comunidades que dependen de él.