Un muerto y más de 100.000 afectados, es enorme el saldo que la depresión tropical Sara dejó en Honduras, Belice y Guatemala el último domingo, luego de su golpe furiosos en varias regiones de Centroamérica, reportaron autoridades de dichos países.
El último reporte de las autoridades hondureñas señaló que el paso de Sara provocó un muerto, 110.889 afectados, 2.534 viviendas dañadas y 1.707 comunidades incomunicadas, ya que el incremento de los cauces destruyó 20 acueductos, nueve puentes y 233 calles.
Los rescatistas se afanaban desde la mañana de este domingo para llegar a los lugares anegados en el norte del país, donde seis departamentos siguen en alerta roja. Además, se monitorea constantemente el aumento del nivel de los ríos en el sur, principalmente a su paso por Tegucigalpa, donde el caudal "comienza a descender", afirmaron las autoridades.
Los servicios de emergencias han tenido que utilizar botes y lanchas para socorrer a muchas personas, incluso entregar comidas o medicamentos con drones ante la imposibilidad de acceder a ciertas comunidades.
Tras golpear duramente Honduras, Sara cruzó a Belice con rumbo noroeste entre la madrugada y la mañana de este domingo y se fue debilitando desde que tocó tierra hasta convertirse en depresión tropical.
Las autoridades beliceñas no reportaron ningún fallecido, aunque debido a las fuertes lluvias se registraron "inundaciones graves" en el curso del río Macal y algunos deslizamientos en las laderas orientales de la Cordillera Maya, en la zona centro del país.
Centroamérica sufrió en 1998 el paso del huracán Mitch, que dejó unos 9.000 muertos y millonarias pérdidas a la economía de los países de la región, principalmente en Honduras.