Contundente. Cualquier país que retroceda en la transición energética, será reemplazado por otros que sigan avanzando en la protección del planeta, advirtió el secretario ejecutivo de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, Simon Stiell.
Durante una visita en Brasil, en el marco de los preparativos para la próxima COP30 que se celebrará en el país amazónico, Stiell subrayó la necesidad de mantener el compromiso global con la transición energética. Aunque no mencionó países específicos, su declaración pareció hacer referencia a recientes decisiones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Como se sabe, el republicano anunció el retiro de su país del Acuerdo de París y suspendió la financiación estadounidense al fondo climático de la ONU, junto con una nueva política energética basada en una fuerte promoción de los combustibles fósiles.
Según Stiell, "algún país puede retroceder", pero "otros toman su lugar" en aras de "un crecimiento económico fuerte, con más empleos, menos contaminación, costes de salud más bajos y acceso a una energía más limpia y más segura".
Aun así, el representante de Naciones Unidas aseguró que la transición hacia las energías limpias es imparable, por la escala colosal de oportunidades económicas que ofrece. Además, alertó que esto es solo palpable en las naciones más desarrolladas, pues "más de dos tercios de los países" carecen de capacidad financiera.
"Hay flujos masivos de capital en las principales economías, pero las menores aún no son capaces de adherir a los vastos beneficios" que promoverá el abandono de los combustibles fósiles, por lo que la transición energética "se mueve a velocidades muy diferentes", ha declarado.
En ese sentido, Stiell ha remarcado la relevancia que tendrá la COP30, que se celebrará a fin de año en la ciudad amazónica de Belém, cuyos resultados considera que "serán cruciales para la lucha climática".