El Gobierno de Panamá anunció la desmantelación de 22 campamentos de minería ilegal que operaban en la cuenca hidrográfica del Canal de Panamá, con el objetivo de extraer oro para financiar otras actividades ilícitas.
Dichas instalaciones estaban ubicadas a lo largo de los ríos Cuango y Culebra, dentro del protegido Parque Nacional Chagres, muy cerca al Caribe. La actividad que realizada en estos puntos venía afectando el ecosistema local, además de constituir delitos ambientales al disminuir el cauce de los ríos, producir sedimentación, y generar contaminación del agua usada por muchas comunidades rurales que habitan este sector".
Además, no se descarta "el uso de químicos como cianuro o mercurio, los cuales pueden afectar la salud pública, por lo cual se tomaron muestras de agua por parte de los técnicos del Ministerio de Ambiente para su análisis con laboratorios especializados".
"Logramos tener 22 campamentos desmantelados, 15 motobombas incautadas, una planta eléctrica confiscada, oro y combustibles hallados en el sitio y también pesas digitales varias", explicó el director de la Policía de Panamá, Jaime Fernández.
Durante la intervención, los agentes policiales detuvieron a cinco personas, informó el oficial. Entre los detenidos hay una persona de nacionalidad colombiana, según la información oficial.
“Así, se desarticuló una estructura criminal de minería ilegal, que presuntamente forma parte de una organización criminal de lavado de dinero a través de la extracción de oro, proceso que causa graves perjuicios ambientales a las áreas naturales", refirieron las autoridades.