Cientos de personas participaron en una protesta pacífica, llevada a cabo en una céntrica plaza de Madrid, en España, para defender del lobo ibérico, que se encuentra amenazado por la caza indiscriminada y por las pocas garantías que el Gobierno español otorga para protégelo.
Los manifestantes solicitaron a las más altas autoridades que mantengan a estos ejemplares en el máximo nivel de protección del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre).
"Los gobiernos de Castilla y León, Cantabria, Galicia o Asturias no van a parar hasta que exterminen al lobo, por eso es muy importante que el lobo vuelva a estar protegido en España", señaló Javier Luna, el presidente del partido PACMA.
El ambientalista y político señaló que el lobo es un animal "imprescindible" para los ecosistemas, por lo que criticó que el Gobierno de Cantabria haya decretado la captura de 41 lobos entre este año y julio de 2026.
Asimismo, fuentes de PACMA han afirmado que esta ofensiva contra el lobo es el resultado directo de las presiones de los grupos de presión de la ganadería y la caza y que no tiene consenso científico. Advirtieron que las recientes modificaciones legales van "más allá de lo permisible" ya que, a su juicio, ahora la llamada 'eficiencia del sistema productivo' puede usarse como justificación para cazar especies protegidas, quedando la protección del lobo al sur del Duero supeditada a decisiones futuras de la Unión Europea (UE).
Tras la concentración en Madrid, el partido animalista también convocó movilizaciones por todo el país, que incluyen protestas pacíficas en Barcelona, Bilbao, Sevilla, Jaén, Valladolid y A Coruña.