Enzo Romero impulsa el desarrollo de prótesis biónicas personalizadasEl ingeniero mecatrónico peruano Enzo Romero fue seleccionado por la Oficina de la Juventud de las Naciones Unidas (UN Youth Office) como uno de los 17 Jóvenes Líderes por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (Young Leaders for the SDGs) correspondientes al periodo 2025–2027.
El reconocimiento, el más importante que las Naciones Unidas otorgan a personas jóvenes menores de 35 años, destaca a las personas que lideran acciones transformadoras para acelerar el cumplimiento de la Agenda 2030.
El docente e investigador de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), y co-fundador de LAT Bionics, impulsa el desarrollo de prótesis biónicas personalizadas de miembro superior, diseñadas mediante tecnologías de manufactura digital accesible, con el propósito de democratizar el acceso a la tecnología asistiva en América Latina.
Su trabajo combina ingeniería, investigación aplicada, diseño centrado en el usuario e impacto social, logrando que más personas con amputaciones recuperen autonomía y calidad de vida. LAT Bionics ha atendido a más de 100 usuarios en el Perú y mantiene una lista de espera de cerca de 300 personas, consolidándose como una de las iniciativas de innovación inclusiva más relevantes de la región.
“Con el tiempo, he comprendido que solamente el desarrollo tecnológico en tecnologías asistivas no es suficiente. Es fundamental procurar promover legislación nacional e internacional que siga defendiendo el derecho al acceso de tecnologías asistivas a toda persona con discapacidad que lo necesite”, expresó Romero.
La iniciativa Young Leaders for the SDGs reconoce, cada dos años, a 17 jóvenes excepcionales de todo el mundo que lideran proyectos transformadores en favor del desarrollo sostenible. Los jóvenes seleccionados trabajan junto a la ONU y sus socios para acelerar la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y movilizar a nuevas generaciones en torno a la Agenda 2030.
La historia de la prótesis de Enzo se remonta a cuando era un niño de 7 años. Enzo nació sin su mano derecha y, cuando cursaba el 3 grado de primaria en el colegio nacional Valle Sagrado de la provincia de Urubamba, en el Cusco, vio la quinta entrega de la saga de Star Wars, El Imperio Contrataca.
“Al final de la película, un androide le diseñó una nueva mano a Luke Skywalker que la había perdido luego de una pelea con sables de luz. Esta nueva mano tenía, incluso, sensibilidad. Fue allí donde me dije: yo quiero lo mismo”, recordó Romero.