Funcionarios buscan limitar el fenómeno a 1,5 gradosLa Presidencia de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP30), manifestó su confianza en la posibilidad de mantener el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados.
En su novena y última carta antes de la cita en la ciudad amazónica de Belém, el presidente de la COP30, embajador André Correa do Lago, exhortó a los países a intensificar la cooperación y la acción climática para intentar alcanzar este objetivo, que ya es puesto en duda por los especialistas.
“El mundo se encuentra ante una encrucijada: permitir que la inercia nos conduzca al colapso o unirnos con coraje y cooperación para avanzar”, afirmó Correa do Lago en su texto.
Según un informe divulgado el jueves por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la temperatura media mundial entre enero y agosto de 2025 fue 1,42 grados centígrados superior a la de la era preindustrial, 13 centésimas menor a la de todo 2024, pero muy próxima al límite de 1,5 grados centígrados acordado como límite máximo en el Acuerdo de París.
En palabras del organismo vinculado a Naciones Unidas, pese a la moderación de temperaturas hasta ahora en 2025, “se mantiene la tendencia al calentamiento extremo” y este año será el segundo o tercero más cálido registrado.
“Esta insólita racha de altas temperaturas, combinada con el aumento récord de las concentraciones de gases de efecto invernadero en 2024, deja claro que será prácticamente imposible limitar el calentamiento global a 1,5 °C en los próximos años sin que las temperaturas superen transitoriamente ese umbral”, admitió la secretaria general de la OMM, Celeste Saulo.
En la carta de la Presidencia de la COP30, titulada “Un llamado a la aceleración, la cooperación y el coraje”, Correa do Lago advierte que el planeta se aproxima a puntos de inflexión climáticos irreversibles, pero sostiene que todavía hay esperanza si se activan «puntos de inflexión positivos».
Ello es posible, agrego, mediante transformaciones tecnológicas, sociales y económicas orientadas a un desarrollo bajo en carbono.
La Presidencia de la COP30 identifica tres prioridades para esta transformación: reforzar el multilateralismo, conectar el régimen climático con la vida y la economía reales, y acelerar la ejecución del Acuerdo de París.
Corraa do Lago subraya que la COP30 será la primera conferencia en la que todo el ciclo de políticas del Acuerdo de París, incluidas las contribuciones nacionales (NDC), los planes de adaptación y los informes de transparencia, estará plenamente operativo, lo que marcará una nueva fase del régimen climático internacional.