La región Cajamarca, en Perú, es una de las pioneras en la producción de café sostenible, cero deforestación y carbono neutro, protegiendo así la biodiversidad y los bosques para las futuras generaciones, informaron representantes de la sociedad civil y de organizaciones que impulsan el desarrollo sostenible de este grano.
Armando Inga, facilitador de la Plataforma Multiactor del Café de Cajamarca (PMACC), instancia que reúne a diversos actores de la industria cafetalera regional, afirmó que con el impacto del cambio climático y el incremento de CO2 en la atmósfera, hay oportunidades para el café de Cajamarca aprovechando también los beneficios de sistemas agroforestales.
“El mercado exterior valora cafés responsables que limiten o disminuyen las emisiones de CO2 Por eso, en los últimos años, han surgido iniciativas hacia la neutralidad del café de Cajamarca, con financiamiento del gobierno de Bélgica y la empresa estadounidense-holandesa JDE Peet’s”, aseveró.
Sostuvo que en esta ruta, foco de la experiencia de la plataforma y la ONG belga Rikolto en los últimos tres años, la medición de la huella ambiental del café es punto de partida para comprender el impacto ambiental de la producción y modificar las prácticas agrícolas.
Estudios en la región estiman que entre el 70 y el 80 % de la huella de carbono del café está en la etapa de beneficio húmedo. Tras estos resultados, se recomendó a los caficultores usar la pulpa de café en la producción de abono orgánico para evitar su descomposición en el medio ambiente.