El Perú desplegó la Estrategia Nacional de Restauración de Ecosistemas y Tierras Forestales Degradadas (ProREST), periodo 2021-2030, para recuperar los espacios naturales que fueron afectados, o casi destrudos, por diversos eventos naturales o causados por el hombre.
La iniciativa viene movilizando 200 proyectos, la mitad de los cuales han priorizado una inversión en las regiones más vulnerables como Cusco y Ayacucho, precisó el director ejecutivo del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), Erasmo Otárola Acevedo. El resto de porcentaje está distribuido a escala nacional.
Asimismo, refirió que la restauración es un tema priorizado a nivel mundial y ya no es suficiente aforestar, reforestar o revegetar la tierra, sino reponer la capacidad de los servicios hídricos, carbono, belleza escénica, polinización, conservación de biodiversidad entre otros que mantengan el bienestar de las poblaciones actuales y futuras.
Es importante resaltar que la restauración se vincula, también, a temas del rescate de conocimiento ancestral, a la participación de las mujeres y jóvenes, lo que permite recuperar los bienes y servicios ecosistémicos que garanticen la seguridad alimentaria.
Por ello, en colaboración con la FAO, se promueve un Plan de Restauración Biocéntrica en comunidades altoandinas del sur del Perú, conservando los ecosistemas y la biodiversidad de los Pueblos Indígenas.
Como se sabe, Serfor reunió a expertos internacionales sobre restauración de Colombia, Paraguay, Chile, Ecuador, Costa Rica, Guatemala y Bolivia en el Primer Congreso Internacional de Restauración de Ecosistemas y Tierras Forestales con Enfoque de Paisaje en la ciudad imperial del Cusco. El objetivo de la reunión es fortalecer las capacidades profesionales, generar alianzas estratégicas y contribuir a la réplica de experiencias que permitan asegurar bienes y servicios ecosistémicos para las poblaciones, reduciendo riesgos ante los efectos del cambio climático.