El Parque Nacional del Manu celebra hoy, 29 de mayo, su 52 aniversario como área natural protegida por el Estado y consolidándose como una genuina joya de la conservación mundial.
La formidable geografía en la que viven miles de especies de flora y fauna únicas en el planeta le han merecido reconocimientos globales como Patrimonio Natural de la Humanidad y Reserva de Biósfera.
El Parque Nacional del Manu tiene una extensión de 1 millón 716,295.22 hectáreas y comprende parte de las provincias de Paucartambo (Cusco) y Manu (Madre de Dios).
Su establecimiento, el 29 de mayo de 1973, tuvo como propósito proteger una muestra representativa de la diversidad biológica, así como de los paisajes de la selva baja, ceja de selva y de los Andes del suroriente peruano. Asimismo, en él se pretende fomentar el turismo sustentado en criterios ecológicos y culturalmente compatibles.
La creación de esta área natural protegida apuntó a promover y facilitar la investigación, educación y recreación, así como contribuir a la preservación del patrimonio arqueológico. Su presencia contribuye al reconocimiento y protección de la diversidad cultural y a la autodeterminación de los pueblos indígenas del área.
El Parque Nacional del Manu protege una de las zonas más importantes del planeta en cuanto a megadiversidad de especies biológicas. Su gran extensión atraviesa frígidas punas que sobrepasan los 4,000 metros de altitud, agrestes montañas boscosas que dan origen a una multitud de pequeñas quebradas y valles, bosques nublados de selva alta, y finalmente el llano amazónico.
Además, este enorme espacio verde alberga una gran cantidad de especies de fauna silvestre. Se ha registrado 228 especies de mamíferos (44% del total en Perú); 1,030 especies de aves (56 % del total); 132 especies de reptiles (30 % del total), 158 de anfibios y 210 de peces.