Las temperaturas altas siguen alcanzando niveles máximos. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) anunció el pasado 6 de septiembre que los meses de junio, julio y agosto fueron los más calurosos de los que se tenga registro en la Tierra.
Según la OMM, agosto tuvo 1.5°C por encima de la era preindustrial que comprende desde 1850-1900. Además, el 2023 es el año más caluroso desde el 2016.
En ambos años, 2016 y 2023, se ha desarrollado el Fenómeno del Niño. Un poderoso evento climático que aumenta las temperaturas de las aguas del Pacífico oriental ecuatorial. También, acentúa fenómenos meteorológicos en distintas partes del planeta, como abundantes lluvias o sequías.
"Lo que estamos observando es una clara consecuencia del calentamiento de los sistemas climáticos", declaró Petteri Taalas, secretario general de la OMM.
Asimismo, el hemisferio norte vive uno de los veranos más calurosos desde 1940, según el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S).