El Consejo Regional de Junín aprobó, de manera obligatoria e indefinida, el cierre total del área de conservación regional (ACR) Huaytapallana, debido al alarmante retroceso glaciar y el riesgo inminente de un alud por desprendimientos de masa de hielo.
“El retroceso glaciar es preocupante. Esta medida tiene el respaldo de la población, comunidades ancestrales, operadores turísticos y el pleno del Consejo Regional. Todos entendemos la urgencia de actuar ahora”, declaró Vladimir Yáñez Rodríguez, gerente regional de Recursos Naturales y Gestión Ambiental.
La decisión, sustentada en informes técnicos y científicos, contempla sanciones administrativas y penales para quienes vulneren esta disposición y causen daños al ecosistema.
El informe además advierte que el nevado atraviesa una fase crítica de deterioro, que afecta directamente el abastecimiento de agua potable para Huancayo y otras localidades del valle del Mantaro.
Asimismo, estudios del Instituto Nacional de Investigación en Glaciares y Ecosistemas de Montaña (Inaigem) alertan sobre una pérdida acelerada de masa glaciar e instan a restringir el acceso humano como estrategia esencial para preservar la integridad ecológica de la zona.
Como parte de las medidas inmediatas, ya se han instalado casetas de control y un sistema de vigilancia permanente para impedir el ingreso no autorizado. En paralelo, un equipo multidisciplinario evalúa las causas del deterioro y las zonas más vulnerables del ecosistema para definir futuras acciones de mitigación.
“Invocamos a la ciudadanía, operadores turísticos y visitantes a respetar esta disposición. El Huaytapallana no solo es una fuente de agua, sino también de cultura, espiritualidad e identidad para nuestra región”, enfatizó Yáñez Rodríguez.
El nevado Huaytapallana ha perdido aproximadamente el 70 % de su masa glaciar en los últimos años.