La región norte y oeste de Australia afronta una terrible ola de calor, que ha provocado el deceso de once personas, reportaron autoridades locales. Según el último pronóstico del Departamento de Climatología, la ciudad de Marble Bar, alcanzó los 49 grados Celsius el sábado 28 de diciembre. La temperatura es tan alta que llegó a derretir los neumáticos de los autos y el calzado de los ciudadanos en Sidney.
Este golpe de calor, ocurrido en pleno verano austral, coincide con nuevas tormentas previstas para los orientales estados de Queensland y Nueva Gales del Sur. Este calor infernal se encuentra bajo la influencia del Fenómeno El Niño, que generalmente provoca temperaturas superiores a la media y se asocia a condiciones extremas que pueden hacer brotar incendios forestales, la llegada de ciclones y sequía.
En tanto, al país austral también está a merced de algunas tormentas que provocarán lluvias torrenciales y vientos de más de 90 kilómetros por hora. A mediados de mes, además, el norte del país sintió el golpe del ciclón Jasper, de categoría 2, que dejó grandes inundaciones en algunas zonas del Territorio Norte.