En un mundo en constante cambio, la cooperación práctica es cada vez más esencial para garantizar la estabilidad regional y el crecimiento sostenible. La relación entre China y Perú ha evolucionado significativamente y se perfila para moldear el futuro de ambos países, así como de las regiones de Asia-Pacífico y América Latina. La visita del presidente chino, Xi Jinping, a Perú, programada del 13 al 17 de noviembre, y su participación en la 31ª Reunión de Líderes Económicos de APEC en Lima subraya la creciente importancia de esta relación bilateral.
El papel de Perú en América Latina se fortalece aún más con su activa participación en APEC y su cooperación con China bajo la iniciativa de la Franja y la Ruta (IFR). Los lazos económicos y culturales entre ambos países se han profundizado a través de importantes proyectos de infraestructura, como el puerto de Chancay, que mejorará la conectividad regional.
El puerto de Chancay: un proyecto de infraestructura emblemático
El puerto de Chancay es un proyecto insignia de la IFR. El puerto de aguas profundas, valorado en 3.500 millones de dólares, está siendo desarrollado por la empresa china COSCO Shipping, y será uno de los puertos más grandes de América Latina una vez completado. Ubicado a solo 78 kilómetros de Lima, el puerto de Chancay servirá como un centro logístico clave, facilitando el movimiento de mercancías entre América Latina y Asia, y proporcionando un vínculo crítico para el comercio en la región de Asia-Pacífico.
La ubicación estratégica del Puerto de Chancay tendrá un impacto transformador en la economía peruana. Permitirá a los barcos evitar el canal de Panamá, lo que reducirá los tiempos de envío hasta en dos semanas y disminuirá los costos de transporte para los exportadores. Esto hará que las exportaciones peruanas sean más competitivas en los mercados globales. Según el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo de Perú, aproximadamente el 25 % de las exportaciones agrícolas del país se canalizarán a través del puerto de Chancay, lo que se espera aumente significativamente la capacidad de exportación de Perú.
Se espera que los beneficios económicos del puerto de Chancay sean igualmente amplios. Se estima que el puerto generará 4.500 millones de dólares anuales para Perú, contribuyendo con un 1,8 % al PIB del país. También se prevé que cree 8.550 empleos directos, muchos de ellos en los sectores de logística y transporte. Al ofrecer oportunidades laborales y fomentar el crecimiento económico regional, el puerto de Chancay se convertirá en una piedra angular de la estrategia de desarrollo de Perú.
Además, el puerto de Chancay jugará un papel vital en la integración comercial regional, proporcionando una puerta de acceso esencial para países como Chile, Ecuador, Brasil y Paraguay hacia el océano Pacífico. A medida que el comercio entre China y América Latina sigue creciendo, el puerto servirá como un importante canal para las exportaciones agrícolas brasileñas, que históricamente han dependido de rutas de envío largas y costosas. La apertura del puerto ayudará a agilizar los flujos comerciales y mejorar la competitividad de las exportaciones latinoamericanas en el mercado global.
Fortalecimiento de los lazos bilaterales
Las relaciones entre China y Perú han recorrido un largo camino desde que ambos países establecieron relaciones diplomáticas en 1971. A lo largo de los años, su asociación ha pasado de ser una simple relación comercial a una asociación estratégica integral.
En 2009, China y Perú dieron un paso importante al firmar un Tratado de Libre Comercio, que entró en vigor en 2010. Este acuerdo marcó el inicio de una nueva era de cooperación, con China convirtiéndose en el mayor socio comercial de Perú. En 2023, el volumen de comercio bilateral alcanzó un récord de 37.691 millones de dólares, impulsado por las exportaciones peruanas de minerales, como cobre y oro, y harina de pescado, que son vitales para el sector manufacturero de China. A su vez, China exporta maquinaria de alta tecnología, productos electrónicos y textiles a Perú, ayudando a impulsar el desarrollo industrial y tecnológico del país sudamericano.
Uno de los aspectos más destacados de la relación entre ambos países es el creciente flujo de inversiones chinas en Perú. Desde 2012, China ha mantenido su posición como el segundo socio comercial más grande de América Latina, con Perú como un beneficiario significativo de esta tendencia. China ha desempeñado un papel clave en el desarrollo de la infraestructura de transporte de Perú, con proyectos como la construcción de carreteras, puertos y ferrocarriles, que han ayudado a mejorar la conectividad del país tanto a nivel nacional como internacional.
En junio de 2024, la presidenta peruana, Dina Boluarte, visitó China para fortalecer aún más la asociación económica. Durante su visita, recorrió fábricas chinas y experimentó de primera mano los avances tecnológicos en sectores como los vehículos eléctricos y los trenes de alta velocidad. Esta visita reforzó la importancia de la cooperación bilateral en áreas como la energía renovable y las tecnologías limpias. El compromiso de Perú de adoptar las soluciones energéticas verdes de China es un desarrollo que tiene un gran potencial para una futura colaboración en áreas como los vehículos de nuevas energías y la producción de energía sostenible.
Intercambios culturales y vínculos entre personas
Los intercambios culturales y entre personas entre ambos países también desempeñan un papel vital en el fortalecimiento de los lazos bilaterales y la Iniciativa de Civilización Global. Perú es hogar de una gran diáspora china, con aproximadamente 2,85 millones de personas de origen chino viviendo en el país. Esta comunidad ha sido durante mucho tiempo un puente entre las dos naciones y ha fomentado la comprensión mutua.
En 2016, Peng Liyuan, esposa del presidente chino, visitó el Colegio Peruano Chino Juan XXIII, una de las escuelas de idioma chino más prestigiosas de Perú, donde fue recibida cálidamente por estudiantes que interpretaron la canción popular china Flor de jazmín como muestra de buena voluntad. La escuela, fundada en 1962, simboliza las conexiones históricas entre los dos países, con fuertes lazos con la comunidad inmigrante china en Perú.
El idioma y la cultura china también se han vuelto cada vez más populares en Perú. Los institutos Confucio y otros programas de intercambio cultural han ayudado a difundir la educación del idioma chino y a promover la comprensión mutua entre ambos pueblos. Estos intercambios no solo son un aspecto importante de las relaciones entre China y Perú, sino que también contribuyen al objetivo más amplio de promover el entendimiento cultural global.
APEC en Perú: Avanzar en la cooperación regional
La reunión del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se celebrará en Perú en 2024, proporcionará una plataforma importante para avanzar en las relaciones entre China y Perú. El tema de APEC de este año, “Empoderar, incluir, crecer”, refleja la necesidad de una mayor inclusividad y sostenibilidad económica en la región de Asia-Pacífico.
La asistencia del presidente Xi Jinping a la cumbre de APEC en Lima destaca el fuerte compromiso de China con el multilateralismo. En sus reuniones previas con la presidenta Boluarte, el presidente Xi enfatizó el apoyo de China a Perú para albergar la reunión y su papel en fomentar una cooperación económica abierta e inclusiva en la región de Asia-Pacífico. La reunión brindará una oportunidad para que China y otras economías de APEC discutan formas de fortalecer la integración económica regional y promover el desarrollo sostenible.
La cooperación de China con América Latina es parte de un esfuerzo más amplio para construir una comunidad con un futuro compartido entre China y América Latina y el Caribe. Esta visión busca crear una región más interconectada y cooperativa, donde todos los países puedan beneficiarse del crecimiento económico compartido.
Mirando hacia adelante: Una asociación para el futuro
Las reuniones de APEC en Lima ofrecerán una oportunidad crucial para que China y Perú fortalezcan aún más sus lazos y avancen en la visión de construir una comunidad Asia-Pacífico con un futuro compartido.
Con una mayor cooperación bajo la IFR, el desarrollo continuo del puerto de Chancay y el aumento de los intercambios entre personas, la relación entre China y Perú beneficiará no solo a ambas naciones, sino también a toda la región de Asia-Pacífico y América Latina. A medida que ambos países aprovechan nuevas oportunidades y trabajan juntos para abordar los desafíos globales, están allanando el camino hacia un futuro más brillante e interconectado.