Aprender sin límites: el taller de alfabetización que transforma la vida de los adultos mayores en Mi Perú

Aprender sin límites: el taller de alfabetización que transforma la vida de los adultos mayores en Mi Perú

19 Ago 2025 | 16:39 h

En Mi Perú, Ventanilla, un grupo especial de estudiantes no convencionales se reúne cada tarde para dar un paso que muchos consideran simple, pero que para ellos es una verdadera conquista: aprender a leer y escribir. Son adultos mayores, algunos con más de 90 años, que por distintas razones no tuvieron acceso a la educación en su juventud. Ahora, gracias a un taller de alfabetización impulsado por la Municipalidad de Mi Perú y el CIAM, estas personas redescubren la oportunidad de aprender y crecer, demostrando que nunca es tarde para cumplir un sueño.

La fuerza de las ganas y la experiencia de vida

El aula es pequeña, pero se llena de energía y entusiasmo. Treinta personas mayores provenientes de distintos rincones del país ocupan sus lugares, con sus cuadernos y lápices, pero sobre todo con muchas ganas de aprender. La profesora Joana les da la bienvenida y con paciencia y dedicación guía a sus alumnos en el proceso de reconocer letras, escribir nombres y entender números. Para muchos, este es un reto grande, pero también una oportunidad para sentirse activos y útiles.

Personas de la tercera edad participan en clases diarias como parte del programa educativo impulsado por la municipalidad y el CIAM.

Uno de los ejemplos más inspiradores es el de Toribia Espinoza, una mujer de 90 años que asiste con su hija, quien le ayuda como intérprete para traducir del quechua al español. Para Toribia, aprender a leer y escribir no solo significa adquirir conocimientos, sino mantenerse fuerte, feliz y conectada con su entorno. La participación en el taller también les permite a los alumnos socializar, compartir experiencias y recuperar la confianza en sí mismos.

Más que alfabetización: bienestar y comunidad

El taller no se limita a enseñar habilidades básicas de lectura y escritura. También incluye actividades complementarias como clases de taichí, que ayudan a los participantes a mejorar su movilidad, reducir el estrés y sentirse más saludables. Estos momentos recreativos son fundamentales para su bienestar físico y emocional, y contribuyen a crear un ambiente de apoyo mutuo y compañerismo.

Adultos mayores asisten al taller de alfabetización para aprender a leer y escribir.

Además, el impacto de este programa trasciende lo educativo. Muchos adultos mayores cuentan que ahora pueden realizar operaciones básicas para manejar mejor su economía diaria y evitar fraudes en mercados o tiendas, lo que les brinda mayor autonomía. También destacan el valor de sentirse productivos y valorados dentro de la sociedad, derribando estereotipos sobre la edad.

Arminda Flores, otra alumna del taller, lo resume con una frase sencilla pero poderosa: “Nunca es tarde para aprender y sentirse otra persona”. Este taller se ha convertido en una oportunidad para recuperar derechos postergados y para demostrar que la educación es un camino abierto a todas las edades.

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